Uno de los objetivos primordiales para cualquier marca dentro de su estrategia, es la de diferenciarse entre sus competidores y ser influyente y relevante ante la audiencia.
Para ello, no sólo se ha de conseguir alcanzar ese punto de influencia donde todos nos escuchen y valoren lo que tengamos que decir; también hay que crearse una buena reputación online y mantenerla, pues será el pilar básico que sustentará esa imagen influyente a lo largo del tiempo.
Así, tenemos que trabajar sobre la imagen y los valores que queremos transmitir como marca, y cuidar sobre todo que la visión que se percibe de nosotros se corresponda con aquello que hemos querido comunicar y mostrar de nosotros mismos. ¿Cómo lo hacemos?
Una de los aspectos más complicados que podemos encontrarnos en Marketing es clasificar a los distintos tipos de consumidores que nos podemos encontrar en el mercado. La sociedad actual nos ofrece una amplia variedad de consumidores, cada uno con sus ventajas e inconvenientes y con sus propias características que decide el acto de la compra o el consumo condicionado por diferentes factores, sobre los cuales el marketing podrá influir en determinados casos, pero en los que, en otros, no podrá hacer uso de sus técnicas o herramientas para influenciar la compra del producto de una determinada marca.
Indagando por diferentes lugares, nos hemos encontrado con esta amplia y detallada clasificación de consumidores atendiendo a diferentes criterios. ¿En cuál de ellos consideráis que encajáis mejor?
Consumidores por tipo de compra
- Planeado: Para este tipo de consumidor la compra es reflexiva. Antes de realizar el acto de la compra ya sabe el qué va a comprar, de qué marca y en qué canal lo va a hacer. Conoce perfectamente todas las ofertas del mercado y no acepta productos sustitutivos. Se ve afectado en poca medida por las acciones de marketing de las marcas.
- Sugestionado: se informa a través de la publicidad ofrecida de las marcas, siendo por tanto influenciada por la misma. Se encarga de estudiar detalladamente las características del producto y estudia las diferentes ofertas que le ofrece el mercado. Es un tipo de consumidor que se ve influenciado por las acciones de marketing y que decide la compra en función de las mismas.
- Impulsivo: Compra por impulso, sin pensar en aquello que está comprando, ni en si lo necesita o no. Simplemente le gusta, le apetece comprarlo y lo hace.