Uno de los objetivos primordiales para cualquier marca dentro de su estrategia, es la de diferenciarse entre sus competidores y ser influyente y relevante ante la audiencia.
Para ello, no sólo se ha de conseguir alcanzar ese punto de influencia donde todos nos escuchen y valoren lo que tengamos que decir; también hay que crearse una buena reputación online y mantenerla, pues será el pilar básico que sustentará esa imagen influyente a lo largo del tiempo.
Así, tenemos que trabajar sobre la imagen y los valores que queremos transmitir como marca, y cuidar sobre todo que la visión que se percibe de nosotros se corresponda con aquello que hemos querido comunicar y mostrar de nosotros mismos. ¿Cómo lo hacemos?
Como consumidores, estamos acostumbrados a los anuncios en televisión, revistas, periódicos, radio, …, pero estamos en un momento de la historia en que se debe sorprender al cliente, dada la cantidad de impactos a los que estamos expuestos. De ahí que cada vez con mayor frecuencia, nos encontremos connuevas formas de publicidad.
Además, los altos costes para campañas en medios de publicidad tradicionales, como radio, prensa o televisión, hacen que se busquen alternativas a menores costes, a la par de alcanzar un mayor impacto.
Carteles sujetos a carros del supermercado, anuncios impresos en bolsas de plástico, pegatinas enormes en el suelo de los supermercados… . También podemos ver autobuses o vagones del metro pintados con anuncios…
Anuncios en los reversos de las entradas del cine para continuar la fiesta en Burguer King o Mc Donald. Durante la película veremos productos que sutilmente aparecen en la escena, lo que se llama productplacement, como refrescos, relojes o coches…