Uno de los objetivos primordiales para cualquier marca dentro de su estrategia, es la de diferenciarse entre sus competidores y ser influyente y relevante ante la audiencia.
Para ello, no sólo se ha de conseguir alcanzar ese punto de influencia donde todos nos escuchen y valoren lo que tengamos que decir; también hay que crearse una buena reputación online y mantenerla, pues será el pilar básico que sustentará esa imagen influyente a lo largo del tiempo.
Así, tenemos que trabajar sobre la imagen y los valores que queremos transmitir como marca, y cuidar sobre todo que la visión que se percibe de nosotros se corresponda con aquello que hemos querido comunicar y mostrar de nosotros mismos. ¿Cómo lo hacemos?
Un perfil que se escucha mucho últimamente es el de Community Manager, mucha gente cree que lo único que hace es navegar continuamente por facebook, tuenti y postea algún comentario de vez en cuando en Twitter. Nada más lejos, un community manager es un experto en Marketing, es decir, alguien que, ante todo, sabe escuchar a sus clientes y leer entre lineas. Un Community Manager debe ser el enlace entre clientes y organización, conoce bien las partes positivas y negativas de los productos que ofrece porque está en contacto continuo con los usuarios de sus productos.
Entre las habilidades que debe contar un buen community manager se encuentran la facilidad y corrección en la redacción de textos (con especial interés a la hora de titular) y la habilidad para fomentar el intercambio de conocimientos y opiniones entre los usuarios. Por eso es una profesión especialmente indicada para los profesionales del marketing, publicistas y periodistas.