Marketing sensorial olfativo ¿a qué huelen las marcas?

Dentro de los tipos de marketing existentes, hay uno que está tomando cada día más fuerza. Se trata del marketing sensorial, pero principalmente el marketing olfativo. Es la capacidad de crear distintas acciones en donde los cinco sentidos del consumidor están presentes. Así, el recuerdo de la marca será completo.

El 80% de la publicidad es visual, mientras que el 75% de las sensaciones cotidianas son influenciadas por el olfato. En el mundo del marketing, hemos pasado de centrarnos en el producto a pensar en el cliente y por ello queremos generarles experiencias.

¿Qué se espera con el marketing olfativo?

Principalmente, lo que se espera es captar la atención de los consumidores por el olfato. Y que de esa forma, cuando vuelvan a tener ese olor cerca, les recuerde de inmediato a la marca.

En definitiva, se trata de identificar a una marca con un aroma particular.

Si la marca decide hacer esta acción a través de su logo, entonces, el logotipo olfativo recibirá el nombre de odotipo.

Los estudios nos confirman que los olores lo que hacen es modificarnos y manipular todas las conductas de las personas. También nos ayudan a generar recuerdos según el tipo de aroma que se produzca.

Dentro de los objetivos que tiene el marketing olfativo se destacan:

• Reconocer la marca por un olor concreto: unir el logo o el nombre de la marca en sí con un aroma.
• Aportar sensaciones y todo tipo de experiencias: como indicamos antes, los aromas nos generan distintas experiencias que recordamos cuando volvemos a olerlos.
• Ver los atributos de un producto por su aroma: cada aroma es diferente y nos producen distintas sensaciones.
• Vínculo emocional: si se genera un vínculo emocional a través del olfato, la marca será inolvidable para el consumidor.

Cómo hacer una campañas de marketing olfativo

Las opciones son infinitas. Es la creatividad la que tiene que estar presente.

Algunas ideas son:

• Packacking con olor: es lo más clásico. Se hace la presentación de un producto con un embalaje en donde se puede sentir el olor. Eso hará que haya una experiencia sensorial, y por lo tanto, que el porcentaje de compras aumente ya que al tener el producto en la mano, ya podremos tener una experiencia inolvidable.
• Puntos de venta: el aroma en los locales o puntos de venta es algo muy importante. Son muchas las tiendas que lo saben y que apuestan por ese olor. Incluso cuando hay franquicias, llegamos a reconocer la tienda por el aroma. Los hoteles son los pioneros en ello y muchas veces, cambian el aroma según la estación del año.
• Vallas publicitarias: puedes hacer publicidad de distintas formas y para ello, añadir aromas para que la persona se transporte a lo que sería tener ese producto o servicio. Si bien los perfumes es lo más clásico, cualquier tipo de producto es válido para ello. Por ejemplo, si es una comida o un viaje, podrías captar el olor y hacer que las personas huelan ese aroma. Automáticamente, con esa parte sensorial se podrán trasladar a ese sitio o a esa acción que deseas.

No hay dudas de que el marketing olfativo es una herramienta muy buena, que bien aprovechada podría ayudarnos a generar fidelidad y muchas más ventas.