Packaging: no es sólo contener el producto

Una de las decisiones más importantes para una empresa es decidir cómo será el envase de sus productos. Es el momento clave para la empresa ya que se juega la imagen que tendrá el producto y la marca. Fundamental porque como decía un antiguo anuncio de colonia… en las distancias cortas es donde un envase se la juega.

Packaging

El packaging es el arte o la ciencia de incluir y proteger cierto producto en determinado envase para su almacenaje y venta. La mayoría de marcas comienzan muy fuerte con la promoción de un nuevo producto pero cuando llegan al diseño del packaging parece que se quedan sin fuelle… Y ahí llega el error. El diseño del envase es uno de los aspectos más importantes: Es lo que más comunica en el punto de venta y es lo que ven tus potenciales clientes cuando están en disposición de comprar, nada más y nada menos.

Antiguamente los comercios tradicionales existía la figura del vendedor, que detrás del mostrador te sugería determinados productos, actuando como un prescriptor. En la actualidad, esa figura está prácticamente desaparecida, y, los productos se tienen que vender por sí solos y además están compitiendo con otras marcas que buscan lo mismo: llamar la atención del comprador.

Por tanto, el packaging no es sólo almacenaje, sino que se ha convertido en una herramienta muy potente del marketing.

En un supermercado tamaño medio, el comprador típico pasa por delante de unos 300 artículos por minuto, y más del 60% de las compras se hacen por impulso. Así, el envase se convierte en un «anuncio de 5 segundos»

Está demostrado que el contacto visual con un pack en el punto de venta es el responsable principal del 70% de las decisiones de compra positivas”, aseguró.

Las tendencias en diseño de packaging parecen claras: interactividad, diferenciación, materiales ecológicos. Precisamente la tendencia al envase ecofriendly es la más repetida por expertos y diseñadores.

Pero la gran revolución, en los próximos años, llegará no sólo del diseño y la innovación en las formas y funcionalidades, sino de la investigación en los materiales. Los packs inteligentes llegarán con films que cambiarán de color si el producto ya no es fresco, packaging que absorberá el oxígeno para que los vegetales duren más; o envases que liberarán conservantes para mantener el producto en las mejores condiciones. Sea como sea, el sector del branding y del packaging repite una consigna clara para los próximos años: innovar, aportar valor, diferenciarse o morir.

¿Lo veremos? Sólo el tiempo lo dirá, y nosotros estaremos aquí para comentarlo.