Cuando creamos nuestra marca, tan importante como planificar y cuidar su proceso de construcción, es registrarla legalmente.
Llevar a cabo el registro de nuestra marca es algo que debemos tener en mente desde el primer momento, ya que si no lo hacemos de la manera correcta y a tiempo, puede suceder que todo nuestro trabajo, esfuerzo e inversiones caigan en saco roto.
En concreto, ¿por qué es fundamental registrar nuestra marca correctamente? Si no lo hacemos...
-Nuestra marca podría confundirse con otra.
-Otra empresa que haya registrado el mismo nombre de marca, podría exigirnos el cese del uso de nuestra marca, o incluso exigirnos compensaciones por trabajar con ella.
Uno de los objetivos primordiales para cualquier marca dentro de su estrategia, es la de diferenciarse entre sus competidores y ser influyente y relevante ante la audiencia.
Para ello, no sólo se ha de conseguir alcanzar ese punto de influencia donde todos nos escuchen y valoren lo que tengamos que decir; también hay que crearse una buena reputación online y mantenerla, pues será el pilar básico que sustentará esa imagen influyente a lo largo del tiempo.
Así, tenemos que trabajar sobre la imagen y los valores que queremos transmitir como marca, y cuidar sobre todo que la visión que se percibe de nosotros se corresponda con aquello que hemos querido comunicar y mostrar de nosotros mismos. ¿Cómo lo hacemos?